martes, 3 de enero de 2012

Despolvando...

Chus, chuss. Mucho polvo se ha reunido aquí, si se fijan, ya estamos en el 2012 (así que vivid como si fuera el último año de vuestras vidas).

Con una escoba y una pala (no las de cavar) se pueden hacer milagros, así que dedos a trabajar.
Se me pasó volando la Navidad y el año nuevo, así que digo: ¡Feliz Navidad y año nuevo (atrasado)!

Hace unos días me descargué el pokémon blanco y, aunque hay "pokémon" horrendos salidos del mismísimo infierno o de la planta de Chernobyl, los tengo que atrapar a todos, aunque algunos tengan cara de estreñimiento letal (al menos, en sus sprites da esa idea) o sean anatómicamente (en el sentido de "pokémon") incorrectos, los tendré que atrapar, al menos, para que se llenen de telarañas en las cajas del PC.

Yo soy de la época de la segunda generación de pokémon, me acostumbré a pokémon como Larvitar, Arcanine, Sneasel y el resto, me extrañé un poco al conocer a los pokémon de la tercera generación y mucho más al conocer los de la cuerta, pero la quinta no me lo esperaba, aún así, hay algunos como Blitzle que, afortunadamente, conserva (aunque sea un poco) el aspecto original de estos bichos.

Creo que, el autor de pokémon o no entiende que cuando algo bueno se prolonga demasiado esto decae o ahora se venda los ojos cuando hace a estos bichos. Y por Arceus, ¡hagan que Ash cresca! ¡Es hartante que tenga esa edad eternamente!